Tratamiento

Adicción a la heroína

¿Cómo dejar la heroína?

La adicción a la heroína es un trastorno por el consumo de sustancias que se caracteriza por un deseo intenso de consumir la droga, un deterioro en la capacidad de controlar el consumo y la continua búsqueda de la droga a pesar de las consecuencias negativas.

La adicción a la heroína afecta en todas las áreas de la vida de la persona, incluyendo su salud física y mental, sus relaciones personales y su capacidad para trabajar o estudiar.

La forma más habitual de consumir heroína hoy en día es esnifada o fumada. Este hecho hace que muchas familias, crean erróneamente que la forma habitual de consumo es por vía endovenosa, y en consecuencia, no detecten su consumo.

La aparición del síndrome de abstinencia física facilita la detección de la adicción a la heroína en muchos consumidores.

Una desintoxicación muy hecha controla eficazmente la sintomatología física de forma que reduce el sufrimiento y la angustia. Esto permite superar el miedo de muchos pacientes a iniciar el tratamiento para dejar la heroína.

Por otro lado, hay que destacar que últimamente han aparecido opiáceos sintéticos (Tramadol, Oxicodona…) que generan fácilmente problemas graves de adicción. Algunas de estas sustancias fueron recetadas inicialmente para el tratamiento de problemas agudos de dolor, pero el uso prolongado y el abuso de ellas crean dependencia grave.

Las 3 fases del tratamiento
para dejar la heroína

3 fases tratamiento 3 fases tratamiento

Fase 1

Desintoxicación

fase 1 adicciones v2 fase 1 adicciones v2

Como es muy conocido, la heroína es una de las drogas más adictivas que hay, dando mucha sintomatología cuando se corta el consumo, lo cual popularmente se conoce como «el mono». El cuadro de abstinencia cursa con estos síntomas: dolores musculares agudos, escalofríos, sudores, malestar gastrointestinal, fiebre, vómitos, ansiedad, agitación, etc.

En Mas Ferriol se hace la supervisión médica de manera rigurosa y diaria. La desintoxicación se hace de forma personalizada, puesto que los dolores y el malestar que presenta cada persona pueden variar.

Fase 2

Deshabituación

fase 2 adicciones c fase 2 adicciones c

La heroína es una sustancia que proporciona sensación de placer y bienestar de manera rápida, y tiene efectos sedantes y analgésicos. La persona con adicción a la heroína busca la manera de anestesiar el malestar que siente.
En el tratamiento para dejar la heroína se trabaja el malestar que ha llevado a la persona en el consumo de esta sustancia, así como una parte más didáctica sobre qué es y cómo funciona una adicción. Se tiene en cuenta la parte emocional, se dan herramientas para gestionar asertivamente el malestar y los conflictos que pueden surgir en el día a día y se dan pautas para crear nuevos hábitos saludables.

A través de las terapias individuales diarias, las dinámicas grupales también diarias y las terapias de familia se acompaña a la persona para que recupere las ganas de vivir y sentir plenamente.

Fase 3

Mantenimiento

fase 3 adicciones c fase 3 adicciones c

La fase de mantenimiento consiste en hacer un seguimiento ambulatorio. Son visitas semanales de 1 hora aproximadamente. A medida que la persona va consolidando la abstinencia a la heroína, las visitas se van espaciando en el tiempo. Se trata de hacer un acompañamiento a la persona en la nueva etapa de su vida donde el consumo de heroína no tiene cabida.

En las visitas se hacen analíticas de orina de control. Estas visitas ambulatorias de seguimiento se pueden hacer a:

  • Mas Ferriol
  • A nuestra consulta médica de Barcelona

En los casos específicos en que la persona que hace el tratamiento residencial de desintoxicación a la heroína en Mas Ferriol viene derivado de otro profesional (psicólogo o psiquiatra), la fase de mantenimiento se llevará a cabo con este profesional, y el equipo de Mas Ferriol solo se hará cargo de la fase 1 y 2.

En otros casos, en que la distancia física dificulta hacer las visitas presenciales con el Equipo de profesionales de Mas Ferriol, se buscará la forma más idónea de hacer este seguimiento ambulatorio.

¿Necesitas orientación para ti o para un familiar?

Puedes llamarnos al +34·872·21·39·70 o dejarnos tu teléfono y te llamaremos a la mayor brevedad

Formatos de tratamiento

Si tú o un familiar está atravesando problemas de adicción y/o salud mental podemos ofrecerte el formato de tratamiento que mejor se adapte a tus necesidades

ctact pg mf ctact pg mf

Centro de ingreso

Contáctanos para más información

ther js mf ther js mf

Terapia presencial

Contáctanos para más información

online ther mf online ther mf

Terapia online

Contáctanos para más información

ther par mf ther par mf

Terapia de pareja

Contáctanos para más información

orientacion familiar c orientacion familiar c

Orientación familiar

Contáctanos para más información

xv diang mf xv diang mf

Orientación diagnóstica

Contáctanos para más información

Tratamiento de ingreso en Mas Ferriol

38 años
de experiencia
Exclusivamente
7 plazas
16
profesionales
Terapias individuales
y grupales diarias
Habitaciones
individuales
Tratamientos
personalizados
Certificados que avalan nuestros tratamientos
gobierno de espana gobierno de espana
logo udg logo udg
generalitat lan generalitat lan
metges bcn lan metges bcn lan
logo cluster 1 1 logo cluster 1 1
top doctors lan top doctors lan
Solo 7 personas. Ingreso individualizado de alta calidad.

¿Necesitas más información? Podemos orientarte con todo aquello que necesites.

Otras dudas sobre la adicción a la heroína

Los efectos físicos de la adicción a la heroína incluyen:

  • Depresión
  • Ansiedad
  • Problemas de sueño
  • Dolors musculares
  • Insomnio
  • Diarrea
  • Vómitos
  • Náuseas
  • Estreñimiento
  • Problemas respiratorios
  • Infecciones
  • Sobredosis

 

Los efectos mentales de la adicción a la heroína incluyen:

  • Pérdida de interés en actividades que antes se disfrutaban
  • Problemas de concentración
  • Problemas de memoria
  • Alucinaciones
  • Delirios
  • Pensamientos suicidas
  • Causas y factores de riesgo de la adicción a la heroína

 

Hoy en día, las causas de la adicción a la heroína se considera que están relacionadas con una combinación de factores biológicos, psicológicos y ambientales.

Algunos de los factores que pueden aumentar el riesgo de adicción a la heroína incluyen:

  • Antecedentes familiares de adicción
  • Trastornos de salud mental, como la depresión o la ansiedad
  • Abuso o negligencia en la infancia
  • Trastornos de personalidad
  • Falta de apoyo social
  • Exposición a la heroína en el entorno
  • Síntomas y señales de la adicción a la heroína.

 

Los síntomas y señales de la adicción a la heroína pueden variar según la persona, pero algunos de los más comunes incluyen:

Síntomas físicos:

  • Pupilas dilatadas
  • Nariz congestionada
  • Enrojecimiento de la piel
  • Sudoración
  • Tremores
  • Mareos
  • Náuseas
  • Vómitos
  • Estreñimiento

 

Síntomas emocionales y conductuales:

  • Cambios de humor
  • Alteraciones del apetito
  • Dificultades para dormir
  • Aislamiento social
  • Problemas en el trabajo
  • Engaño o robo para obtener dinero para comprar heroína

Los signos de adicción a la heroína incluyen:

  • Uso compulsivo: La persona siente la necesidad de consumir heroína repetidamente, incluso si quiere detenerse.
  • Cambios físicos: Pupilas contraídas, somnolencia extrema, pérdida de peso, marcas de inyección en los brazos o piernas.
  • Síntomas de abstinencia: Náuseas, vómitos, dolores musculares, insomnio, diarrea, ansiedad extrema cuando no se consume la droga.
  • Aislamiento social: La persona puede alejarse de amigos y familiares, abandonar actividades que antes disfrutaba.
  • Comportamientos de riesgo: Mentir, robar o participar en actividades ilegales para obtener la droga.

El tiempo que tarda en desarrollarse una adicción a la heroína varía entre personas, pero debido a su potencia y a la rapidez con la que afecta al cerebro, algunas personas pueden volverse adictas después de solo unas pocas dosis. La heroína induce una tolerancia rápidamente, lo que significa que se necesita cada vez más cantidad para sentir los mismos efectos, lo que aumenta el riesgo de dependencia.

Los síntomas de abstinencia de la heroína pueden ser extremadamente incómodos y comienzan unas pocas horas después del último uso. Incluyen:

  • Dolor muscular y óseo.
  • Náuseas, vómitos y diarrea.
  • Escalofríos, sudoración y fiebre.
  • Ansiedad, irritabilidad, y depresión severa.
  • Insomnio.
  • Intenso deseo de consumir la droga.

 

Los síntomas de abstinencia suelen alcanzar su pico entre 24-48 horas después del último uso y pueden durar de una semana a diez días, aunque algunos efectos psicológicos (como la depresión) pueden persistir durante meses.

Dejar la heroína sin ayuda médica es extremadamente difícil y potencialmente peligroso debido a la gravedad de los síntomas de abstinencia. Aunque algunas personas han logrado dejar la droga por su cuenta, la mayoría necesita tratamiento especializado para superar tanto los síntomas físicos como las causas psicológicas de la adicción. En muchos casos, se recomienda desintoxicación supervisada médicamente para manejar los síntomas de abstinencia de manera segura.

Existen varios tratamientos efectivos para la adicción a la heroína:

  • Medicamentos: Fármacos como la metadona, buprenorfina y naltrexona pueden ayudar a reducir los síntomas de abstinencia y los deseos de consumir heroína. Estos medicamentos son parte de los tratamientos de mantenimiento con opioides (TMO) y se utilizan para estabilizar al paciente a largo plazo.
  • Terapia conductual: Las terapias, como la terapia cognitivo-conductual (TCC) y la terapia motivacional, ayudan a modificar los comportamientos relacionados con el consumo de drogas y a desarrollar habilidades para lidiar con el estrés y los desencadenantes.
  • Desintoxicación supervisada: El proceso de desintoxicación médica se realiza bajo la supervisión de un equipo de profesionales de la salud que pueden manejar los síntomas de abstinencia y garantizar que el paciente esté estable.
  • Programas de rehabilitación: Los programas residenciales o ambulatorios proporcionan un entorno estructurado para la recuperación, a menudo combinando medicamentos, terapia, y apoyo grupal.

El tratamiento de mantenimiento con metadona o buprenorfina es una forma de tratamiento asistido por medicamentos (TAM) que ayuda a las personas con adicción a la heroína a controlar sus síntomas de abstinencia y a reducir los antojos. Estas medicinas actúan sobre los mismos receptores cerebrales que la heroína, pero de manera más controlada y segura, sin producir el mismo «rush». Esto permite a los pacientes estabilizarse y concentrarse en la recuperación sin experimentar los efectos debilitantes de la abstinencia.

Sí, el tratamiento con metadona o buprenorfina es seguro cuando se usa bajo la supervisión de un médico. Estos medicamentos son parte integral de los programas de tratamiento para la adicción a los opioides, ya que ayudan a reducir el riesgo de recaídas y sobredosis. Sin embargo, es importante seguir el plan de tratamiento cuidadosamente, ya que el uso indebido de estos medicamentos puede llevar a problemas.

El consumo prolongado de heroína provoca cambios en el cerebro que afectan las áreas relacionadas con el control del comportamiento, la toma de decisiones y la regulación emocional. Esto puede resultar en problemas cognitivos, como dificultades para concentrarse, recordar cosas y tomar decisiones racionales. También puede provocar problemas emocionales a largo plazo, como depresión y ansiedad crónica. Además, los daños en los sistemas de placer y recompensa del cerebro hacen que las personas sientan menos placer en las actividades normales.

Si un ser querido está luchando con la adicción a la heroína, es importante tomar medidas con empatía y buscar ayuda profesional. Aquí hay algunas sugerencias:

  • Evitar la confrontación directa o culpar a la persona, ya que esto puede hacer que se aísle más.
  • Hablar abiertamente sobre las preocupaciones de manera comprensiva, evitando el juicio.
  • Ofrecer apoyo y alentar a la persona a buscar ayuda profesional.
  • Consultar con un especialista en adicciones o buscar un programa de intervención si la persona se niega a recibir ayuda.
  • Proteger tu propio bienestar al establecer límites claros para evitar que la adicción afecte tu vida.